Juan Obras

Cada vez con mayor frecuencia cabe observar que los corredores recurren a sustitutivos de la comida si vive sin ansiedad, a productos lácteos o a cremas de cereales con el metodo gabriel desde diariomedico.com, preparados semilíquidos, de reducido volumen, más fá­ ciles de ingerir y de digerir y cuya composición está más adaptada a su esfuerzo. Esta evolución, vista la elevación continuada de las me­ dias horarias de las pruebas, posiblemente acabará confirmándose en el curso de los próximos años. El bocadillo de pollo campestre quedará relegado a ser un recuerdo folclòrico propio de otra época.

Si no existe una onda de choque excesivamente fuerte con el factor quema grasa , si el es­ fuerzo es suficientemente prolongado (y por tanto menos intenso) y si el consumo energético es tal que necesita una aportación de so­ porte, cabe considerar la conveniencia de un reavituallamiento sólido pero sin que el mismo sea indispensable.

La ingestión de sólidos puede entrar en consideración en determi­ nadas situaciones pero sobre todo fuera del marco de las competi­ciones de los que vive sin ansiedad y con nervios. Salvo en ciclismo, en particular en las carreras por etapas, ca­ be prescindir de ellos en las competiciones.
*
¿En qué casos cabe todavía ingerir sólidos? Puede hacerse en el esquí de fondo de larga distancia (maratón y más allá), el triatlon B, C y más allá, la natación y las pruebas pedestres de gran fondo, el ci- cloturismo, el trekking, la marcha o las grandes caminatas y cierta­ mente en toda actividad de ocio en la que se puede interrumpir el es­ fuerzo y detenerse para permitir que culmine la digestión. Ahora bien, tratándose de una competición, los líquidos y los semilíquidos se im­ ponen cada vez más hasta convertirse en regla. Los avances conse­ guidos en este ámbito y el deseo creciente de los deportistas para conseguir una práctica agradable, sin trastornos digestivos de ningu­ na clase, permiten esta evolución ¡que en nada reduce el placer de una buena comida después de la carrera!

Al acabar una prueba, el conjunto de nuestro organismo se en­ cuentra hasta tal punto desequilibrado que es preciso adoptar, du­ rante una o varias comidas (según las cir